"Nos Sacaron de la cantina para apoyar al Duarte"

"Nos trajeron de la cantina al V Informe del Duarte"

El organizador del PRI en Tihuatlan llegó al bar, nos explicó el pedo y pues a la flota le gusta el desmadre y nos vinimos pedos, otros crudos.

Nos ofreció que nos repondría lo que nos quemamos en la briaga, nos adelantó la mitad: 50 pesos; pero nos dejó traer el cuartito de aguardiente que sobraba.

"Estábamos echando unos alcoholes, salimos de la chamba y nos metimos al bar"

Alan Jared Hernandez Jimenez, oriundo de Tihuatlan, Veracruz, no es un acarreado común y corriente, al igual que los demás enuncia con fervor el apellido del góber, no obstante declara que por falta de simpatizantes lo reclutaron de ultima hora pese a su estado de ebriedad.

"Nos adelantó la mitad, 50 pesos, nosotros le dijimos a ese wey que no sabemos de estas ondas; pero nos dijo que no había bronca, que el chiste era hacer ruido, hasta nos dejo traer el cuartito de aguardiente que sobraba"

El hombre de 35 años, mas allá de su escandaloso aliento a restos de comida y alcohol preparado de guayaba, sobresale del tumulto por su atuendo: porta ingenuo una camisa tipo polo color azul marino con el escudo del PAN.

Salió en caravana desde las 7 de la mañana, no ha dormido, tiene hambre y depende de la gratificación que le prometió la organizadora para llevarle algo de comer a su papá, que ya no pudo hacer el viaje por problemas de salud.
"Quería venir a apoyar el viejo, pero ya está mal"

Al igual que los demás acarreados, lo forman en hileras rojiverdes que bajan de camiones urbanos para apoyar a Javier Duarte en su quinto informe de gobierno.
Hay mucha gente y poco oxígeno para el hombre aturdido, se marea, eructa y amaga con vomitar a los presentes.
se escuchan risas y señalamientos hacia el por su condición, el organizador lo detiene y le dice discretamente: " compórtate o no te daré los 100 varos", el hombre hace caso omiso y se acerca a las barras de seguridad en la entrada del velódromo internacional de Xalapa.

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Jared y su grupo, asediados por moscas en las braguetas, hacen un esfuerzo por recordar las porras que su lider les dictó en el recorrido, finalmente llegan hasta el protocolo de seguridad.
los dos amigos, un poco menos sacudidos por el licor, no dirigen la palabra a los oficiales de la guardia civil y entran al recinto caminando derechito.
- A ver, usted, sópleme.
-¿y ahora porqué jefe? yo vengo a apoyar al Duarte.
-Hágame el favor de retirarse, está en estado inconveniente.
-No me chingue oficial, si no entro no me van a dar mi ayudita

A lo lejos los dos cuates de parranda se doblan de risa y con muecas le dicen "por pendejo"

Jared no tuvo suerte, le impidieron el acceso, deberá esperar hasta que la gente regrese a los camiones, está hambriento y no tiene centavo alguno, contempla el panorama y se rasca la cabeza.
El camion lo abrirán en cinco horas, finalmente decide echarse a dormir en la banqueta.

Crónica de Miguel Angel Leon Carmona.
publicada en blog.expediente.mx 16 de noviembre de 2015.